Golpes Infames

Escribió Pablo Neruda: "Después del golpe de estado al presidente Salvador Allende en Chile, por primera vez los poderosos pensaron que las leyes tan cuidadosamente fabricadas por ellos les pudieran pegar alguna vez en la cabeza, y así fue. Corrieron con sus acciones, sus joyas, sus billetes sus monedas de oro y se fueron a refugiar a alguna parte; unos a Argentina, otros a España, incluso algunos llegaron hasta Australia. El terror del pueblo los habría hecho llegar fácilmente al Polo Norte."

En Honduras, por más de 188 años se han sucedido los mismos gobernantes pero con diferentes etiquetas. Todos hicieron lo mismo. Continuaron los harapos, las viviendas indignas, los niños sin comida, sin escuela, ni zapatos, aumentaron los prisioneros y los garrotazos contra el pueblo indefenso.

¿Y qué es lo que pasa? Que tal vez algunos tuvieron la oportunidad de sustraer del erario cantidades de dinero tal que hoy tanto tienen hasta para patrocinar golpes de estado. Las situaciones del pueblo siguen cada vez más rezagadas en sus economías, vida social y cultural.

Cuando alguien se encuentra en esta posición, no puede ver la verdad porque ha aprendido a colar el mosquito pero a tragarse el camello. Nunca entendimos los mensajes de aquel santo varón de Galilea, de amarnos los unos a los otros. Porque teniendo, ¿Que nos importan los que no tienen? Es probable que esto lo entiendan a su manera, así como viven. Pero lo que no lograran comprender es el valor de la sangre que se derramo en la cruz del calvario. Porque viven de manera terrenal, poderosos. Y todo lo que vaya en contra de sus intereses lo consideran deleznable.

Esto me causas un dolor paroxístico. Porque lo que algunos piensan, muchas veces subrepticiamente, es la canción de un gesto arrogante, insolente y pernicioso. Los que piensan así, quieren siempre el poder a como dé lugar y se afilian o apoyan a candidatos afines a sus intereses. Les gusta oír la palabra esperanza. Es más, les complace que llamen a Honduras el país de la esperanza. Los candidatos a la presidencia, al congreso y a las municipalidades ¿con que derecho se auto denominan candidatos de la esperanza? En realidad esta esperanza se basa en promesas que no se pagan y cuyo cumplimiento se aplaza para el próximo periodo gubernamental y porque no decirlo, para el próximo siglo.

Esto no estaba escrito en los libros de Honduras, que ha vivido de manera desesperada en la esperanza. El Señor Jesucristo ordeno: "A todo el que te pide dale". Pero les han dado palos, miseria y vergüenza. A estos aristocráticos autores, yo no les maldigo, solo le pido al Creador que les de sabiduría.